Guerra de Ucrania – Día 954

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha anunciado recientemente que participará personalmente en la próxima cumbre de Ramstein, en donde presentará su «Plan para la Victoria de Ucrania» ante sus principales aliados, tras hacer lo propio hace unos días en los Estados Unidos. La guerra, mientras tanto, continúa su curso un tanto al margen de la política internacional, marcada por la reciente toma de Vuhledar por parte del Ejército ruso y por las dudas en torno al número de bajas que esto ha supuesto y a los medios con que se está dotando a Mordvichev para que continúe manteniéndose a la ofensiva. Todo en una jornada en la que ha sido noticia el derribo de un dron S-70 Okhotnik sobre Kostyantynivka, algo que servirá, tras analizar los restos, para determinar el estado de avance ruso en esta materia.

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Como adelantábamos en la entradilla, después de que en las últimas horas se hablase de un avión de ataque Su-25 ruso derribado sobre la localidad ucraniana de Kostyantynivka, finalmente se ha determinado, tras analizar los restos, que se trataba en realidad de un UCAV S-70 Okhotnik abatido por la propia aviación rusa. Un S-70 que al menos sobre el papel es el más avanzado de estos aparatos en desarrollo por parte de la industria aeronáutica rusa, y el modelo en el que hace unos años fijaron sus esperanzas como complemento de los Su-57 Felon; aparatos que quizá nunca lleguen a producirse en cifras aceptables.

A propósito del S-70 Okhotnik-B (Cazador), cabe decir que como muchos otros diseños presentados o adelantados por parte de Rusia en los últimos años –ahí están el famoso Su-75 Checkmate, el T-14 Armata…- en todos los dominios, parecía poco probable que llegase a algo más allá de ser un prototipo o demostrador tecnológico, a pesar de noticias recurrentes en los medios rusos que incidían en los avances del programa.

Para los lectores menos familiarizados, se trata de un ala volante no pilotada y autónoma, con capacidad de combate en base a sus sistemas integrados y a una bodega de armas interna. Se cree que su programa de desarrollo comenzó en 2011, aprovechando los conocimientos de las empresas Sukhoi y MiG (integradas dentro de united Aircraft Corporation desde 2006) y, en especial, lo aprendido durante el desarrollo del UAV MiG Skat. Se cree, también, que en 2014 se preparó la primera maqueta a escala real, y que en 2017 se finalizó el primer prototipo, si bien habría que esperar a noviembre de 2018, fecha en la que realizó de manera plenamente autónoma diversos carreteos y pruebas por la pista, alcanzando los 200km/h, pero sin llegar a levantar el vuelo.

Después de sucesivas pruebas adicionales, el primer vuelo tendría lugar el 3 de agosto de 2019 (aunque según algunas fuentes a finales de mayo se llevaron a cabo pequeños “saltos” sobre la pista) en los alrededores del centro de vuelos de Akhtubinsk, teniendo una duración de alrededor de 20 minutos. Más adelante, ya el 27 de septiembre, se publicó un nuevo video en el que aparecían volando de manera coordinada un Su-57 y un S-70, supuestamente operando de forma totalmente autónoma, en una prueba que debía servir para medir las prestaciones del radar y para testar el uso de armamento desde larga distancia.

Prototipo del S-70 Okhotnik durante sus pruebas en pista. Fuente: Ministerio de Defensa de la Federación Rusa.

De hecho, el Su-57 y el S-70 tienen mucho en común, considerándose el segundo un complemento del primero y el primer paso hacia el desarrollo de aparatos no tripulados capaces de operar en coordinación con los tripulados por parte de la industria rusa. De hecho, el tren de aterrizaje del S-70 recuerda poderosamente al del Su-57 -es más que probable que se haya aprovechado el diseño- y, de igual manera, parece ser que el motor que lo propulsa es un derivado del AL-41F.

Así las cosas, y según explicara en su día Serguéi Shoigú -anterior ministro de Defensa ruso-, las misiones principales del S-70 deberían pasar por servir como base para armamento, recolección de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, mediante el uso de equipos electroópticos y de infrarrojos. Además, se esperaba por entonces que llegase a incorporar una buena cantidad de sistemas de reconocimiento de señales electromagnéticas e incluso equipos de guerra electrónica. Las pruebas de vuelo, por cierto, deberían culminar entre 2023 y 2024, con lo que la guerra de Ucrania debería haber servido hasta cierto punto para validar el diseño y, en su caso, mejorarlo.

Sin embargo, no hay demasiados datos relativos a su uso en este escenario y, de hecho, solo hay informaciones muy esporádicas y hasta cierto punto dudosas que hacen referencia a vuelos sobre territorio ucraniano. Eso es lo que hace tan interesante lo sucedido en las últimas horas, pues desde hace tiempo se especulaba con que la producción en cadena podría comenzar hacia la segunda mitad de 2024 y el aparato que hoy ha sido derribado podría ser uno de los primeros ejemplares de serie.

Sea como fuere –y más allá de lo que estos vuelos nos dicen sobre los problemas de las defensas aéreas ucranianas– lo relevante del caso es que el aparato caído sobre Kostyantynivka permitirá a los ingenieros ucranianos (aunque no solo, ni mucho menos), estudiar a fondo el diseño de estos aparatos y, con ello, hacerse una composición de lugar del verdadero estado de la industria aeroespacial rusa, que si bien ha demostrado capacidades en la construcción de drones suicidas tras importar tecnología de Irán y ha sido capaz de producir en masa cuadricópteros de pequeño tamaño, en muchos casos gracias al trabajo voluntario, parece seguir arrastrando enormes carencias en otros segmentos.

Pasando a las novedades sobre el terreno, en las últimas horas han sido relativamente escasos los ataques rusos con drones, hablando los ucranianos de apenas unas pocas unidades de Shahed-131/136 (Geran-1/2) empleadas o derribadas. Pese a ello, se ha hablado de explosiones en Micolaív y de actividad antiaérea en regiones como la de Odesa.

Del lado contrario, después de los intensos ataques ucranianos de la jornada anterior, lo que tenemos es un dron ucraniano causando daños en el distrito de Stary Oskol, en Bélgorod. Eso sí, desde el Ministerio de Defensa ruso han asegurado haber derribado en las última 24 horas «ocho misiles HIMARS de fabricación estadounidense, tres bombas guiadas Hammer de fabricación francesa y 55 vehículos aéreos no tripulados». Además, se ha declarado la alerta aérea en la península de Crimea por el supuesto lanzamiento de misiles por parte ucraniana. Por otra parte, ha fallecido en la explosión de un coche bomba Andri Korotky, uno de los directores de la central nuclear de Zaporiyia, que Rusia mantiene bajo su control, en una acción que habría sido llevada a cabo nuevamente por el GUR ucraniano, desde donde acusan a Korotky de traidor, por «cooperar voluntariamente con los invasores rusos».

En cuanto a los combates y los movimientos, comenzando por el sector de Kursk, nos encontramos con que el Ejército ruso habría retomado completamente la localidad de Veseloe, capturada hace unos días por las AFU. Del mismo modo, estas últimas habrían sido expulsadas de algunas áreas al suroeste de la aldea de Medvezh’e, al este de Veseloe.

Dado que no hay novedades procedentes del sector de Járkov, toca hablar del más sureño de Kupiansk-Svatove-Kreminna, en donde las tropas rusas han tomado Andríivka y la parte de Stelmakhivka que no obraba en su poder, al tiempo que continúan acercándose al río Oskil, avanzando para ello desde el saliente de Pischane.

Cambiando a Chassiv Yar, si bien no se han producido movimientos, allí ha continuado el empleo de bombas planeadoras por parte de la Fuerza Aérea rusa en las últimas horas.

En cuanto al de Toretsk, tras internarse por partes del centro urbano, el Ejército ruso ha pasado a dirigirse contra la zona minera al sur de la ciudad, en dirección hacia los dos grandes «terrikons» o escombreras.

Pasando ya al sector de Pokrovsk-Kurajove, prosiguen las dinámicas de las jornadas previas, incluyendo el alto número de pérdidas por parte rusa en relación con las bajas ucranianas. Sin embargo, y a pesar de ello, parece que el general Mordvichev, quien comenzó a intensificar sus ataques tras la visita meses atrás de Guerásimov y quien ha sido recientemente visitado por Belousov, no está preocupado por las pérdidas, que por el momento puede reponer, de forma que el Ejército ruso continúa a la ofensiva en esta zona, especialmente en dirección a Selydove y la vecina Tsukuryne, de la que ya controlarían una buena parte según algunas fuentes. Además, y al mismo tiempo, continúan aumentando las zonas bajo su control en dirección a Kurajove, por ejemplo al este de Zhelanne Pershe y, también, en torno a Hostre.

Por último, tras tomar Vuhledar, las tropas rusas están buscando avanzar en dirección a Bohoyavlenka, situada al norte, tanto desde el oeste de la propia Vuhledar, como desde Vodyane. De esta forma, aunque es difícil evaluar el desgaste que la toma de Vuhledar, al igual que los ataques en el eje de Pokrovsk han supuesto para las armas rusas, todo indica que su próximo objetivo pasa por cortar a los ucranianos la posibilidad de utiliza la carretera entre Kurajove y Velyka Novosilka, haciéndose poco a poco con todo el territorio al sur de la misma. Eso sí, no hay que olvidar, como explicamos hace unas semanas, que cuanto más se alejen los rusos de Donetsk, en donde tienen un centro logístico de primer orden, más difícil tendrán avanzar.

Contexto internacional, diplomacia y sanciones

En el apartado internacional, sin duda lo más relevante tiene que ver con los preparativos de la próxima reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania, que se reunirá en breve en la base de Ramstein, en Alemania. En este caso, la reunión será un tanto especial, pues por una parte contará con la presencia del presidente estadounidense, Joe Biden, en la que será una de sus últimas apariciones de este tipo (la cita coincide con la ministerial de la OTAN) y, según se ha sabido, también con la del presidente ucraniano, Zelenski, quien presentará a sus aliados más estrechos su «Plan para la Victoria de Ucrania».

A propósito, ha sido el propio Zelenski quien ha anunciado la noticia, refiriéndose a la que será la 25ª cumbre de Ramstein como la primera a nivel de jefes de Estado y de Gobierno y explicando sus intenciones. Ahora bien, cabe recordar que el citado plan del presidente ucraniano ya fue presentado recientemente ante el gobierno y la oposición estadounidense y, también, que fue muy criticado en algunos círculos por incompleto e inconsistente.

Otro tema que sin duda se abordará, aunque el principal será el de la provisión de armamento, será el de la estrategia de salida al conflicto, incluyendo dentro de esta la posible integración euroatlántica de Ucrania y el grado en el que esta se dé en el futuro. A propósito de esto ha hablado hace unas horas el secretario general saliente de la OTAN, Jens Stoltenberg, quien considera que Ucrania podría integrarse en la Alianza a pesar de que parte de su territorio está ocupado por Rusia (es decir, a pesar de tener contenciosos territoriales abiertos). No es cuestión baladí, pues la seguridad futura de Ucrania y sus posibilidades de no ser presa de ulteriores ataques rusos dependerán de las garantías de seguridad que sus aliados ofrezcan al país. Garantías que, en cualquier caso, deben ir más allá de las recogidas hasta ahora en los múltiples acuerdos de seguridad bilaterales firmados.

Dicho lo cual, aprovechamos para informar a nuestros lectores de que acabamos de publicar un artículo del profesor Sven Biscop en el que analiza cómo la guerra de Ucrania se relaciona con las disputas entre Occidente y China y cómo, dada la situación, la estrategia de uno y otro bando debería replantearse para perseguir objetivos asequibles…

Pasando a otros asuntos, el primer ministro ucraniano ha anunciado durante la pasada jornada la adhesión de Ucrania al Comité de Política Digital y al Comité de Política Regulatoria de la OCDE, lo que, según Shmyhal, «dará acceso a información y asociaciones de que los países más exitosos del mundo están implementando soluciones efectivas en estas áreas”.

Cambiando de tema, desde Francia su ministro de Defensa, Sébastien Lecornu, ha dado a conocer un nuevo contrato por parte de Ucrania destinado a la adquisición de una docena de obuses autopropulsados de 155mm CAESAR 6×6, producidos por la empresa francoalemana KNDS. Recordemos que dicha empresa se había comprometido a duplicar la tasa de producción de estos sistemas para cubrir tanto las necesidades francesas como las del mercado exterior, incluyendo las de Ucrania, que lleva desde los primeros meses de guerra utilizando los CAESAR.

Pasando a Rusia, tenemos que el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, ha acusado al gobierno ucraniano de estar detrás de las explosiones en el Nord Stream, alegando que es inverosímil que se acuse a un «grupo de buceadores» de una acción de este tipo que, según el diplomático ruso, no podría haber sido implementada sin apoyo oficial. Así, según Nebencia «»Dos años después, todas nuestras sospechas sobre las declaraciones occidentales, que en realidad eran confesiones de implicación en las explosiones del Nord Stream por parte de varios funcionarios estadounidenses y europeos, no se han disipado, sino que se han acentuado. Teniendo en cuenta la línea de conducta de nuestros colegas occidentales, incluidos los del Consejo de Seguridad de la ONU, no puede ser de otra manera».

Por otra parte, aunque en este caso el protagonista es Bielorrusia y concretamente su presidente, Aleksander Lukashenko, tenemos que el ínclito político ha asegurado que apoyará a Ucrania, llegado el caso, si los polacos intentan apoderarse del oeste del país. No es la primera vez, en cualquier caso, que Lukashenko hace este tipo de declaraciones, que llegan justo en una semana en la que Ucrania y Polonia han limado buena parte de sus diferencias históricas y que tratarían, lógicamente, de meter baza entre ambos aliados.

Por último, cerramos hoy recomendando un artículo del medio estadounidense Foreign Policy, en el que se habla sobre cómo las operaciones de guerra informativa rusa han venido creciendo a nivel global en los últimos tiempos y, también, sobre el tipo de medidas y coordinación entre estados y agencias que requerirán para ponerles freno.


Comentarios

4 respuestas a «Guerra de Ucrania – Día 954»

  1. Avatar de Gonzalo

    En mi modesta opinión, el frente de Donbass está colapsando. Lo de «enormes pérdidas rusas» era lo que le decían los generales alemanes a Hitler en la guarida del lobo durante la eterna retirada de 1944. Pinta mal.

    1. Pinta muy mal, lo decimos informe a informe. Sin embargo una cosa no quita la otra. Está claro que las pérdidas rusas son inmensas, pero también que están logrando reponerlas. Del mismo modo, está claro que la situación es cada vez más complicada para Ucrania y que, mientras se preparan para 2025, quizá deberían acortar la línea de frente y densificar así sus posiciones, con más hombres por metro de frente. No son opciones excluyentes.

  2. Hola Cristian . Simplemente comentar que escuche tu colaboración en Intereconomía el viernes por la tarde y me congratulé de que una semana antes les escribí para que en algún momento te entrevistasen para dar tu visión geos estratégica de ucrania, aunque es cierto que por las noticias se habló principalmente de Israel,
    Espero te llamen de nuevo,

    1. Muchas gracias, Julián. En realidad nos llaman de decenas de medios, pero desde hace alrededor de un año decimos por sistema a todo que no por falta de tiempo y porque no nos compensa aparecer en prensa generalista (nunca pedimos dinero a cambio y es tiempo que podemos dedicar a otras cosas). Sin embargo, en este caso Marta Isern fue muy amable y educada y además nos dio la opción de aparecer en el momento que mejor nos viniese, así que acepté. Un saludo.

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