Guerra de Ucrania – Día 919

Desde la Unión Europea, el Alto Representante ha anunciado que pretenden adiestrar a 75.000 militares ucranianos antes de fin de año, 15.000 más que el objetivo inicial. Desde la OTAN, su todavía Secretario General, Jens Stoltenberg, ha dejado claro que la acción ucraniana en Kursk está totalmente acorde con el derecho internacional, pues el derecho de autodefensa de Ucrania «no se detiene en la frontera». Mientras tanto, un ataque ruso contra Járkov ha dejado al menos siete muertos y decenas de heridos, mientras que un ataque ucraniano contra Bélgorod ha provocado la muerte de cinco y heridas a treinta. Sobre el frente, lo más significativo de la jornada son los redoblados avances rusos en el sector de Pokrovsk, en donde amenazan entre otras localidades Ukrainsk y, en las últimas horas, han logrado completar su control de las orillas del Vovcha hasta Karlivka, al tiempo que buscan proseguir si avance por esta vía de agua en dirección sur, quizá para enlazar con el eje Mariínka-Heoríivka.

Sin ti, este sitio no podría seguir funcionando. Ayúdanos mediante una pequeña donación a través del siguiente enlace:

Durante la última jornada de guerra, si bien no se han registrado ataques masivos por ninguna de las partes, sí se han producido dos que merece la pena reseñar. En el primer caso, la Fuerzas Armadas rusas han lanzado hasta «cinco ataques aéreos» contra la localidad de Járkov, en la que por el momento se han registrado siete fallecidos -incluyendo un menor de edad- y más de setenta heridos al ser alcanzado un edificio residencial por una bomba planeadora rusa.

No ha sido en cualquier caso el único objetivo de Rusia en una jornada en la que se han lanzado sucesivas alarmas aéreas por parte del Ministerio de Defensa de Ucrania y en la que se ha hablado también de explosiones por ejemplo en Brovary (cercana a Kiev y de infausto recuerdo para Rusia). Además, el Ministerio de Defensa ucraniano ha anunciado el supuesto derribo de 12 de los 18 drones Shahed-131/136 (Geran-1/2) empleados por Rusia en las últimas horas, aunque no habría podido evitar el impacto tampoco de un misil balístico Iskander-M lanzado al parecer desde la península de Crimea.

Del lado contrario, al menos cinco personas murieron y treinta y siete resultaron heridas como consecuencia de un ataque ucraniano contra la ciudad de Bélgorod, en Rusia, según ha anunciado el gobernador regional, Viacheslav Gladkov. Este, además, ha acusado a Ucrania de haber utilizado municiones de racimo en esta acción, añadiendo también que «siete adultos y tres menores» estarían en estado grave. Por otra parte, dos personas más han resultado heridas tras ser alcanzada una tienda de comestibles en Oktyabrskiy, en la misma región, en la que se ha podido ver un impactante vídeo en el que un misil sin identificar logra destruir un vehículo en marcha en una de las carreteras de esta óblast rusa. Además, se habrían registrado también varias explosiones en Kirovskoye, en la península de Crimea, según algunas fuentes.

En otro orden de cosas, tras la muerte del teniente coronel Oleksiy «Moonfish» Mes, quien ha sido despedido oficialmente hace unas horas, Zelensky habría destituido al comandante de las Fuerzas Aéreas Mykola Oleshuk, nombrando como sustituto interino al general Anatoliy Kryvonozhko. La hipótesis más probable, aunque no se ha ofrecido todavía una explicación oficial, tendría que ver con el fallecimiento de «Moonfish» en acto de servicio, en circunstancias todavía por aclarar. Esto último no es baladí, en tanto en Ucrania han sido varios, incluidos cargos electos, los que han levantado la voz contra la gestión que el Gobierno de Zelenski ha hecho de la información en relación con las circunstancias en las que se produjo la muerte del piloto ucraniano.

Pasando a los movimientos y los combates, en esta última jornada desde el Gobierno ucraniano han hablado de avances de dos kilómetros en la región rusa de Kursk, si bien no hay demasiadas pruebas de ello. Las declaraciones se han producido en el marco de una reunión en la que han participado tanto Zelenski como Sirsky. Dicho lo cual, los recuentos OSINT continúan asignando a Ucrania un territorio bastante inferior al que anuncian las autoridades de país, algo lógico en cualquier parte pues una parte sustancial del frente, que ambos bandos se atribuyen, no es sino una variable «zona gris» en la que se continúa combatiendo y se producen cambios constantes, pero mínimos.

En el sector de Járkov, si bien no han trascendido noticias en los últimos días, se sigue luchando, lo que permite a Rusia seguir fijando tropas ucranianas en el mismo, todo lo cual, junto a la decisión de abrir un nuevo frente en Kursk, sigue siendo para algunos analistas una de las razones evidentes de la degradación del frente en Donetsk. Argumentos que, por cierto, no emplean únicamente analistas extranjeros, sino también algunos ucranianos, que no ven el beneficio de la decisión de extender el frente en un momento en el que los problemas de falta de personal y material son evidentes. Desde la cúpula ucraniana, sin embargo, parecen continuar convencidos de que esta acción ofrecerá réditos estratégicos, mientras parecen contar con el apoyo de personajes como el Secretario General de la OTAN, quien ha defendido que se trata de una totalmente legal.

Más al sur, en el sector de Kupiansk, aunque se mantiene relativamente tranquilo, siguen produciéndose acciones esporádicas, como hemos ido relatando en los últimos días. La sensación, tras los últimos avances rusos, es la de que desde este país pretenden «cortar en dos» la cabeza de playa ucraniana al este del río Oskil, como previa a una ofensiva que buscaría obligar a las AFU a retroceder hasta el mismo, aunque esta no parece inminente. Por el momento, en cualquier caso, las tropas rusas continúan lanzando pequeños ataques que han logrado algunas victorias tácticas recientemente, como la entrada en Stelmakhivka o los avances al suroeste de Pischane.

Pasando al noroeste de Gorlóvka, el Ejército ruso ha conseguido en las últimas horas nuevos avances en dirección al centro de la ciudad de Toretsk, para lo cual está siguiendo el eje marcado por la principal vía que cruza la localidad desde Pivnichne. Todo al tiempo que al suroeste de Niu-York continúa buscando la toma de Panteleimonivka y, con ello, acercarse a la carretera H20.

Dicho esto, y una jornada más, lo más relevante continúa ocurriendo en el sector de Pokrovsk, en donde los avances rusos continúan acelerándose, como puede verse en el mapa sobre estas líneas. Así las cosas, durante la última jornada se ha constatado no solo la toma de Karlivka, que ya se conocía, sino avances rusos adicionales en las inmediaciones, en una dirección que apunta no solo a ampliar la base del saliente ruso, sino también a una intención de amenazar todas las posiciones ucranianas al este del río Vovcha, que continúa su curso en dirección sur hacia la zona de Kurajovo. Hay que tener en cuenta que más allá de los avances físicos, hay otras acciones, como los ataques mediante drones a antenas de comunicaciones, que son indicativos de lo que Rusia busca, como los que se han producido recientemente contra algunas situadas en Gornyak (48.05853710477658, 37.38745232348611).

Además de lo anterior, que sería el tercer eje ruso en el sector de confirmarse, lo que tenemos es que el Ejército de este país ha seguido avanzando en los dos principales hasta el momento. Por una parte, el que por el noroeste va hacia Myrnohrad y, por el oeste, hacia Selydove, direcciones por las que pretenden alcanzar Pokrovsk.

Por último, en el sector de Vuhledar se han registrado también ganancias rusas al norte de Mykilske.

Contexto internacional, diplomacia y sanciones

El apartado internacional comienza hoy por las consecuencias de la reunión informal de ministros de Defensa que se ha producido recientemente en la capital europea, Bruselas. En la misma, si bien había división al respecto, los presentes decidieron no solo aumentar el esfuerzo destinado a adiestrar a militares ucranianos, elevando el objetivo para este año de 60.000 a 75.000 efectivos, sino también que la formación se llevará a cabo muy cerca de las fronteras de Ucrania, pero en ningún caso en el interior del país, uno de los puntos que mayores roces han causado entre los diplomáticos de los EEMM.

El otro punto interesante serían las discusiones acerca del empleo por parte de Ucrania de armamento de largo alcance contra territorio ruso. Al parecer algunos como Borrell habrían argumentado a favor de que este tipo de decisiones (otorgar permiso a Ucrania para su uso) deberían ser comunitarias, mientras que desde varios EEMM se mostraron partidarios de que continuaran siendo prerrogativa nacional, acordándose con Ucrania a nivel bilateral.

Dicho esto, y según ha anunciado el Alto Representante, Josep Borrell, hasta el momento desde la Unión Europea se han transferido a Ucrania más de 43.000 millones de euros en ayuda desde el inicio de la invasión rusa, han sido entrenados 60.000 militares ucranianos, se han movilizado más de 1.400 millones de dólares procedentes de los beneficios de los activos rusos congelados en suelo comunitario y se han entregado 650.000 de los 1.000.000 de disparos de artillería prometidos.

Además, recordó la necesidad de desbloquear los 6.600 millones de euros del Fondo de Asistencia a Ucrania, «la famosa cantidad de dinero -bloqueada desde hace meses- del EPF», si bien algunos ministros recordaron a su vez que «no se trata de dinero ucraniano, sino de su dinero, porque no han recibido el reembolso de los gastos ya realizados».

Más allá de la Unión Europea, en las últimas horas el ministro ucraniano de Defensa, Rustem Umerov, se ha reunido en los Estados Unidos con su homólogo norteamericano, con quien ha mantenido una «reunión constructiva» y a quien ha informado de la situación en el frente, los futuros objetivos de Ucrania y, por supuesto, de las principales necesidades del país en términos de armamento y equipo, entre otros. La reunión, además, ha servido para preparar la que próximamente celebrará el Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania, en la que será el 24º encuentro de esta organización y tras la que se esperan nuevos anuncios de ayuda militar.

Tras este encuentro se ha producido uno más amplio en el que han tomado también parte el jefe de la Oficina del Presidente, Andriy Yermak, así como el viceministro de economía ucraniano, entre otros altos cargos. Además de expresar el agradecimiento a los Estados Unidos y a su presidente por el apoyo prestado hasta el momento, y como es lógico, los ucranianos han insistido en la necesidad de que los Estados Unidos levanten el veto al empleo del armamento de largo alcance proporcionado en el interior del territorio ruso.

Siguiendo con los Estados Unidos, se ha sabido que la empresa Raytheon, uno de los principales productores de defensa del Mundo, ha sido multada recientemente por un importe de 200 millones de dólares por un total de 750 violaciones de la Ley de Control de Exportación de Armas, tras determinarse que varios empleados de la empresa han estado involucrados en ventas ilegales, parte de las cuales habrían tenido a Rusia como destino. La mitad de la multa, en cualquier caso, no deberá ser abonada, siempre que la empresa utilice esos fondos para fortalecer su programa de control interno.

En otro orden de cosas, y a propósito de la próxima visita de Putin a Mongolia, el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, ha pedido a este país que proceda a la detención del líder ruso, como corresponde al ser estado signatario del Estatuto de Roma. En concreto, Kuleba ha dicho: «Pedimos a las autoridades mongolas que ejecuten la orden de arresto internacional obligatoria y transfieran a [Vladimir] 
Putin a la Corte Penal Internacional de La Haya». Desde Rusia, sin embargo, no se han mostrado en absoluto preocupados por esta posibilidad. De hecho, ni siquiera será la primera vez que alguien buscado viaje a un país miembro de la CPI sin consecuencias, algo que ya ocurrió años atrás con el sudanés Omar Al-Bashir, quien viajó a Sudáfrica sin ser arrestado y sin que este país fuese sancionado.

Siguiendo con Ucrania, el presidente Zelenski, quien ha encabezado una reunión -a la que hemos hecho referencia en el apartado anterior- en la que ha tomado parte la cúpula militar, además de referirse a la situación en el frente o hablar sobre la preparación de las escuelas para el próximo nuevo año académico, ha hecho una referencia a otro tema: la situación del sector energético. En concreto, han analizado el estado del mismo, la respuesta a los daños provocados por los últimos ataques rusos y también todo lo relacionado con la construcción de estructuras de protección.

Pasando a la ayuda militar, en las últimas horas la fundación Come Back Alive ha anunciado la entrega a las Fuerzas Armadas ucranianos de un nuevo sistema SIGINT (Signal Intelligence) adquirido en un estado miembro de la OTAN sin especificar. El coste del mismo ha sido de casi 19 millones de grivnas o, lo que es lo mismo, de algo más de 410.000 euros al cambio.

Por último, aunque en un orden de cosas muy diferente, según el ISW varias encuestas rusas han mostrado un aumento del descontento público con el Kremlin desde que comenzó la incursión ucraniana en la región de Kursk. Así, sin ir más lejos, el instituto FOM publicó el 30 de agosto una encuesta realizada el día 25 del mismo mes en la que se recogía cómo el 28% de los encuestados expresaban su descontento con las acciones de las autoridades rusas. Por comparar, el 25 de julio la misma tasa se situaba en el 18%, subiendo al 25% el 11 de agosto y siendo la más alta desde el otoño de 2022, marcado por la movilización parcial de la población rusa.


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *