Una vez completada la reconquista de Robotino, las Fuerzas Armadas ucranianas han continuado acercándose a las zanjas antitanque situadas entre dicha localidad y Verbove, tal y como muestran las imágenes por satélite, en las que se aprecia la destrucción en la zona provocada por la artillería. Al mismo tiempo, un segundo buque de carga ha logrado completar la ruta entre la costa ucraniana y las costas rumanas, burlando así el bloqueo naval ruso, en el que ni la aviación ni la marina de este país parecen poner demasiado empeño, mientras en Moscú esperan la llegada de Erdogan para hablar sobre las exportaciones de grano de Ucrania. También en el plano internacional, han vuelto a ser noticia tanto Wagner Group como Bielorrusia, pues los vecinos de este país que forman parte de la UE han comenzado a coordinar posiciones por si la situación de seguridad se deteriorase.
El pasado 27 de agosto, por seguir con uno de los temas tratados en varios de nuestros últimos informes, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, entregó sus banderas de combate a varias unidades de nueva creación, incluida una que tendrá como objetivo la guerra naval en base a drones y que actuará en estrecha colaboración con el SBU (Servicio de Seguridad), dirigido por Vasyl Malyuk. Se convierte así Ucrania en uno de los primeros estados en disponer de una unidad específica para este tipo de operaciones, que entroncan directamente con las llevadas a cabo en la primera mitad del siglo pasado por la X MAS italiana, con la salvedad de prescindir del elemento humano en forma de tripulación (aunque en algunos casos sigue siendo imprescindible contar con militares sobre el terreno para obtención de inteligencia, marcación de objetivos, etcétera).
No es, por supuesto, algo totalmente novedoso. Hace ya años que se viene experimentando con este tipo de ingenios que algunos de los socios de Kiev tenían ya bastante avanzados antes del inicio de la invasión rusa de Ucrania. Por ejemplo, el Reino Unido ha venido organizando los ejercicios «Unmanned Warrior» desde hace años, en los que se han podido probar tanto drones aéreos para utilizar desde embarcaciones de la Royal Navy como, cada vez más, vehículos navales tanto de superficie (USV) y submarinos (UUV) no tripulados.
En el caso estadounidense, hace ya tiempo que cuentan con unidades específicas, como la Unmanned Surface Vessel Division (USVDIV), aunque los experimentos vienen datan, en realidad, de varios años antes, siendo numerosos los programas en marcha desde mediados de la pasada década. De hecho, pese a la experiencia acumulada en superficie, podría decirse que el terreno en el que más avances han logrado es el submarino, con proyectos como el XLUUV (Extra Large UUV), que prometen revolucionar la guerra bajo el mar.
Destacable es, incluso, el caso de Irán, un país que ha seguido un camino propio en todo lo relacionado con los drones y que ha entendido a la perfección su potencial en la guerra asimétrica, lo que les ha llevado tanto a desarrollar soluciones como los Shahed-131/136 (aunque no solo) -posteriormente empleados por Rusia con profusión y fabricados en su territorio bajo licencia- como una armada de drones navales.
No han sido los únicos, por supuesto. China es otro país que está destinando importantes recursos a este particular, al igual que la propia Rusia. En este caso, no obstante, en lugar de intentar seguir el ritmo de los avances ucranianos, dada la falta de una armada a la que golpear, o de objetivos estratégicos que no puedan ser alcanzados mediante misiles, han seguido concentrando sus esfuerzos en la vertiente de obtención de inteligencia y de sabotaje, para lo que cuentan con la 29ª GUGI.
Quizá esa es una de las razones por las que, a pesar de los ingentes medios de que las Fuerzas Armadas rusas disponen en muchos ámbitos y de la inversión en todo lo concerniente a drones aéreos, Ucrania haya logrado espectaculares golpes empleando para ello sistemas autónomos de superficie, como vimos a propósito de los ataques a Sebastopol, Novorossyisk o el puente de Crimea. Si bien Rusia ha establecido defensas en torno a puntos estratégicos, como el citado puente, desde sistemas de guerra electrónica a generadores de humo para limitar la visibilidad o barreras fijas destinadas a impedir el paso de UUV y USVs, la falta de comprensión de la amenaza ha disminuido sus posibilidades de enfrentarla con éxito. Algo que a los españoles debería servirnos como toque de atención, pues los recursos que destinamos a este particular son limitadísimos, mientras la amenaza crece de forma exponencial…
Cambiando de tercio, y pasando a lo ocurrido sobre el terreno, un día más misiles rusos han alcanzado el interior de Ucrania. Pese a que la defensa antiaérea de este país asegura haber derribado dos Kalibr y dos Kh-59, no han podido impedir que hayan sido alcanzados puntos como Poltava o Hoholeve –en donde ha resultado destruida una fábrica de lubricante y han fallecido al menos tres personas-, mientras que en Krivói Rog los restos de los misiles entrantes o los interceptores han causado daños menores en una vivienda.
Del lado contrario las defensas aéreas rusas han estado activas en Crimea, concretamente sobre Yevpatoria. Además se han registrado explosiones un día más en Donetsk y posiblemente también en la localidad portuaria de Berdiansk, atacada también ayer, bajo control ruso y, como sabemos, fundamental para su logística en el sur de Ucrania.
Al norte del frente, a pesar de la ausencia de avances rusos en dirección a Kupiansk, sí han llegado en las últimas horas imágenes por ambas partes que dan fe de que se sigue operando y combatiendo en la zona, al menos en forma de duelos artilleros. Precisamente de esta ciudad han llegado noticias sobre la evacuación de civiles, ordenada semanas atrás y que ha afectado desde el 9 de agosto al menos a 300 menores que continuaban viviendo en Kupiansk a pesar de la cercanía de los combates y la posibilidad de sufrir bajas civiles debido a los bombardeos. Al sur de este sector, en los bosques de Kreminna, la situación se mantiene estable, con ligeros avances ucranianos en los últimos días que lo que hacen es confirmar la imposibilidad de romper el frente en dicha zona, a pesar de los esfuerzos rusos en los últimos dos meses.
En el caso de Bakhmut, las tropas ucranianas continúan –además de luchando al norte de la urbe, cerca de Berkhivka y en Orikhovo-Vasylivka– con sus intentos de rodear la aldea de Andriívka, al sur de Klischiívka, en donde han vuelto a progresar en dirección al canal de agua dulce.
Al oeste de Donetsk en las últimas horas sí se han producido novedades, en tanto además de ataques rusos en distintas direcciones, las AFU habrían conseguido aliviar ligeramente la presión de los primeros al norte de Krasnohorivka. También en las inmediaciones de Vuhledar se habría combatido, igualmente con una pequeña progresión por parte de Ucrania.
En cuanto a los dos ejes de avance principales de la ofensiva ucraniana, el de Velyka-Novosilka y el de Orijiv, las novedades son desiguales. En el primer caso, la situación continúa siendo estable, aunque hay fuentes que hablan de ganancias ucranianas al noreste de Pryiutne mientras las AFU intentan avanzar al sur de Staromaiorske. En el segundo, los militares ucranianos han alcanzado ya distintos puntos de la «línea Surovikin» entre Robotino y Verbove. Precisamente en esta zona, junto a la línea a la altura de Verbove, se aprecia perfectamente el efecto de los combates y los ataques artilleros, como muestran las imágenes por satélite. Los combates más importantes, en cualquier caso, se estarían produciendo en torno a Novoprokopivka, donde se espera que Rusia intente presentar mayor resistencia.
Contexto internacional, diplomacia y sanciones
La última semana de agosto ha comenzado con escasa actividad institucional y diplomática a nivel internacional, aunque a medida que vaya a dar comienzo septiembre esta comenzará a despuntar.
Aun así, el ministro de Exteriores Dmytro Kuleba ha viajado a República Checa, pero este no será su único viaje de la semana pues se dirigirá a Francia y también a España. En este último caso, hay que tener presente que mañana dará comienzo la cumbre informal de los ministros de Defensa de la UE en Toledo donde se espera que el apoyo a Ucrania sea un punto central en la agenda.
Durante su visita a Chequia, el ministro Kuleba se ha reunido con su homólogo, Jan Lipavský, quien le ha invitado a dirigirse a los embajadores checos. Ante todo, el ministro ucraniano ha destacado que la diplomacia ucraniana y checa trabajan codo con codo para defender la libertad, avanzar en el camino de Ucrania hacia la UE y la OTAN, fortalecer los vínculos con las naciones africanas, así como en otras áreas prioritarias compartidas. De igual forma, durante su intervención ha destacado que la “Diplomacia de la guerra les ha enseñado cuatro verdades: ser ambiciosos, mantenerse optimistas durante cualquier tormenta, ser francos y orientados a los resultados, y nunca rendirse”.
Por otro lado, Kuleba se ha reunido con el asesor de seguridad nacional de Chequia, Tomáš Pojar, para mantener conversaciones en profundidad sobre el desarrollo de la cooperación en defensa entre ambos países. Asimismo, ha invitado al gobierno y a las empresas checas al primer Foro de Industrias de Defensa de Ucrania el próximo otoño.
Cambiando de tercio, a nivel humanitario, hay que destacar que más de 343 niños han sido evacuados de las zonas de primera línea en el distrito de Kupiansk, en el óblast de Járkov desde el 9 de agosto. Cifras que responden a la orden de evacuación obligatoria de 37 asentamiento sen dicho distrito. No obstante, el total de civiles evacuados, incluyendo a los menores, asciende a 1.433.
De otro lado, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdoğan, espera reunirse con su homólogo ruso, el presidente Vladímir Putin, antes de que comiencen los debates de alto nivel del 78º periodo de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas el 19 de septiembre. En principio, esta reunión podría tener lugar el próximo viernes 8 de septiembre, aunque por el momento se desconoce el lugar donde se darán cita.
El propósito de la reunión será el de discutir perspectivas de una solución pacífica a la guerra en Ucrania, per también sobre las distintas opciones para suministrar cereales a los países más necesitados tras la retirada de Rusia de la Iniciativa de Granos del Mar Negro.
Continuando con otras próximas reuniones relevantes, el presidente Putin le ha comunicado al primer ministro de India, Narendra Modi, que, ante su “imposibilidad” para asistir, la delegación rusa en la Cumbre del G20 del 9 al 10 de septiembre estará encabezada -una vez más- por el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov.
Por último, Polonia, Letonia, Lituania y Estonia han prometido cerrar conjuntamente sus fronteras con Bielorrusia en el caso de que tenga lugar una “situación crítica”. El ministro del Interior de Polonia, Mariusz Kaminski, ha indicado, además, de que las “represalias inmediatas” se aplicarían con independencia de si la frontera es polaca, lituana o letona y que todos los pasos fronterizos tanto de ciudadanos como de mercancías pasarían a estar cerrados. Sin embargo, no se ha precisado qué entienden los tres países por “situación crítica”, aunque sí han destacado en su Declaración conjunta una petición a Bielorrusia para que expulse al grupo Wagner de su territorio, “retire a todos los inmigrantes ilegales de las zonas fronterizas y los devuelva a sus países de origen”.
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