Mientras prosiguen las discusiones y los desencuentros relativos a la posible entra de Ucrania en la OTAN, Polonia ha entregado a este país helicópteros de combate Mi-24 renovados a los que se sumarán en el futuro más cazabombarderos MiG-29, una vez reciban nuevos F-35. Precisamente con Polonia ha tenido lugar hace unas horas un simbólico acto de reconciliación, que busca cerrar una herida que data de la Segunda Guerra Mundial. Además de lo anterior, hoy se han publicado algunos rumores según los cuales Guerásimov habría sido apartado del mando de las tropas rusas en Ucrania, así como sobre lo que podría ocurrir con el acuerdo de granos una vez expire.
Delimitada por el contexto que explicamos ayer, la guerra de Ucrania continúa su curso, caracterizada por el estancamiento. Ahora bien, que las líneas de frente se muevan tan lentamente que en ocasiones los cambios sean imperceptibles o que acciones propias de otro tipo de enfrentamientos, como los envolvimientos sean imposibles, no quiere decir que la guerra sea «estática», pues no ha dejado de evolucionar, algo que hemos señalado en numerosas ocasiones.
Es quizá a nivel táctico donde se aprecian los cambios más significativos. Quizá no sirvan para cambiar el tipo de guerra que vemos e incluso con la entrada en liza de nuevas armas, así como de Tácticas, Técnicas y Procedimientos (TTPs), para lo más que llegue sean para que Ucrania alcance una victoria frustrante (no entraremos hoy en el terreno de la prospectiva, que ya hemos tratado suficientemente).
Las TTP, como sabemos, se desarrollan a partir de la experiencia y el análisis de las operaciones pasadas, y se actualizan y modifican constantemente para adaptarse a las nuevas tecnologías, enemigos y teatros de operaciones. Se enseñan y se practican en entrenamientos y ejercicios para que las unidades puedan realizar sus tareas de manera efectiva y eficiente, siempre que hay tiempo para ello. Esto es, ni más ni menos, lo que están haciendo muchos ejércitos occidentales -pero no solo, desde luego– en base a lo que les llega de lo ocurrido sobre el terreno en Ucrania.
Cuando no se cuenta con las ventajas que otorgan el tiempo y la distancia, las nuevas TTPs se van improvisando sobre la marcha -generalmente hay una relación entre el grado de improvisación y el número de bajas- hasta que se «da con la tecla». Esto es algo que estamos viendo en las últimas semanas en el caso de Ucrania, en particular con sus ingenieros militares, como relata Oliver Carroll para The Economist.
Los ingenieros militares -pues no todos los lectores tienen que saberlo necesariamente-, desempeñan un papel crucial en las operaciones militares, pudiendo asumir una amplia variedad de misiones durante los conflictos. En lo que concierne a la guerra de Ucrania y a la fase de esta en la que nos movemos, sus tareas principales -al menos del lado ucraniano- se relacionan con la apertura de brechas en las posiciones defensivas enemigas permitiendo así el paso a las columnas blindadas y acorazadas, para lo que deben efectuar labores, entre otras, de:
- Reconocimiento: Antes de que se pueda abrir una brecha, los ingenieros militares deben realizar un reconocimiento exhaustivo de la defensa enemiga. Esto puede implicar la identificación de áreas fortificadas, la detección de minas y artefactos explosivos, la evaluación de las condiciones del terreno y la determinación de la mejor ubicación y método para abrir una brecha.
- Demolición y despeje de obstáculos: Los ingenieros militares son generalmente los responsables de la demolición y el despeje de obstáculos en el campo de batalla. Esto puede incluir -y aquí está una de las claves de lo que vemos en las últimas fechas- la neutralización de minas terrestres y explosivos improvisados, así como la eliminación de barricadas físicas como alambre de púas, muros o fortificaciones.
- Construcción de puentes y caminos: Los ingenieros militares pueden ser responsables de la construcción de puentes temporales y caminos para facilitar el paso de las tropas y el equipo. Estos pueden ser necesarios para superar ríos, barrancos u otros obstáculos naturales o artificiales.
- Protección de la Fuerza: Los ingenieros militares también pueden ser responsables de establecer o mejorar las posiciones defensivas propias una vez que se ha abierto la brecha. Esto podría incluir la construcción de trincheras, fortificaciones y otros tipos de barreras defensivas.
El caso es que, como cuenta el bueno de Carroll- después de los varapalos sufridos en los inicios de la ofensiva, con la pérdida –al menos temporal– de buena parte de sus medios antiminas, las Fuerzas Armadas ucranianas han decidido cambiar de proceder, utilizando ahora a sus equipos de desminado a pie.
Esto, si bien estaría ofreciendo réditos militares al permitir abrir pasillos en los campos de minas tan profusamente sembrados por sus contrapartes rusas, estaría provocando no obstante un importante número de bajas entre el personal especializado ucraniano. No en vano se verían obligados a llevar a cabo su actividad bajo el fuego de mortero y también de los obuses y cohetes rusos.
Además en un momento en el que, pese a que el fuego de contrabatería ucraniano se ha demostrado mortal para el Ejército ruso, tampoco desde Moscú han dejado de buscar soluciones, adaptando su «complejo de reconocimiento-fuego» y apoyándose en los drones para destruir los radares de contrabatería empleados por las AFU y recibidos desde Occidente.
Pasando ya a lo ocurrido en las últimas horas, cabe comenzar con los rumores relativos al cese del general Valery Guerásimov como comandante en jefe de las fuerzas rusas en Ucrania, una información aparecida en medios de dudosa credibilidad como el Daily Mail británico, basándose en una noticia de Moscow Times (fundado por exiliados rusos en Reino Unido) al parecer a partir de mensajes de Telegram. A falta de más datos, en el mejor de los casos Guerásimov habría sido sustituido en la práctica por Teplinsky, aunque nominalmente seguiría ostentando el mando. En cualquier caso, es algo a tomar con todas las precauciones.
En segundo lugar, con un supuesto ataque ucraniano con un misil de crucero contra el puente de Crimea que, según las autoridades rusas, habría sido neutralizado por las defensas antiaéreas, lo que no ha evitado que el tráfico en el puente haya sido cortado durante unas horas. Además de lo anterior, los ucranianos habrían logrado alcanzar Melitópol.
Más allá de esto, en las últimas hora se ha informado de ataques rusos al norte del frente, en dirección a Novoselivske y Stelmakhiv’ka, en la región de Lugansk. No hay cambios.
En el área de Bakhmut, en donde Ucrania sigue logrando pequeños avances, especialmente al sur en zonas como las que rodean Ozarianivka y Kurdyumivka, Rusia ha estado construyendo nuevas posiciones defensivas. Además de esto, se ha seguido luchando en dirección a Berkhivka
Algo más al sur, al oeste de la ciudad de Donetsk, Rusia habría conseguido retomar nuevamente parte del terreno recuperado por Ucrania semanas atrás en la zona de Vesele. Además se habría seguido combatiendo en Permovais’ke y también en dirección a Nevels’ke así como en Mariínka.
Respecto a la zona más meridional del frente, se sigue luchando tanto en el eje de Velyka-Novosilka como en el de Orihiv, sin apenas novedades.
Contexto internacional, diplomacia y sanciones
Un día más el contexto internacional viene marcado por los preparativos de la Cumbre de la OTAN en Vilna que tendrá comenzará en apenas 48 horas. Una Cumbre en la que, recordemos, Ucrania espera recibir compromisos concretos por parte de los aliados en relación con su membresía a la OTAN y las garantías de seguridad para el país.
El presidente Volodímir Zelenski ha viajado hoy hasta la localidad ucraniana de Lutsk para reunirse allí con su homólogo, Andrezj Duda, si bien es cierto que el propósito central de la visita era otro distinto al de discutir los preparativos de la Cumbre; algo sobre lo que también han podido conversar, obviamente. Además, aprovechando su visita a la región de Volyn, Zelenski ha mantenido una reunión de coordinación sobre a situación socioeconómica y de seguridad en la región.
La razón de ser de este encuentro no anunciado previamente pasaba por rendir homenaje a las víctimas de la Masacre de Volhynia de 1943, de la cual fueron responsables los miembros del Ejército Insurgente Ucrania y que costó la vida a miles de ciudadanos polacos. Al respecto, el presidente Zelenski ha publicado “¡La memoria nos une! ¡Juntos somos más fuertes!”, en referencia a un acto que puede ser considerado como una reconciliación histórica entre ambos países.
Otra de las noticias ha circulado hoy en las redes a raíz de este encuentro entre los Presidentes es la relativa al envío no publicado anteriormente de alrededor de una docena de helicópteros Mi-24 por parte de Polonia a Ucrania.
Por su parte, el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, ha hablado por teléfono con el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken. El representante ucraniano ha informado que están trabajando para que las decisiones finales de la Cumbre “sean una victoria para todos: Ucrania, la OTAN y la seguridad global. Asimismo, Kuleba le ha agradecido a Blinken el último paquete de ayuda militar anunciado con ocasión del día 500 de la guerra, y calificándolo de innovador e incluyendo “municiones muy necesarias”.
En las últimas horas, además, Kuleba ha indicado que “Ya se han acordado varias decisiones importantes para Ucrania y la OTAN” y, “según los resultados de la cumbre, nuestro camino hacia la Alianza será definitivamente más corto”. Sin embargo, también ha señalado que “falta una solución que haga que este camino sea aún más rápido: claridad sobre invitar a Ucrania a unirse”. No duda tampoco en afirmar que “Para la OTAN, perder esta oportunidad significaría darle un regalo a Putin en un momento en que necesita ser presionado en todos los frentes”.
Otros preparativos de la Cumbre, como hemos recogido en más de un informe, se están llevando a cabo a nivel bilateral. Prueba de ello es que el presidente de EE. UU., Joe Biden, ya está en Europa. Más concretamente, hoy ha llegado al Reino Unido para reunirse mañana con el primer ministro Rishi Sunak, pero también con el rey Carlos III. Posteriormente se dirigirá a Vilna para la Cumbre y, una vez finalice esta, terminará su viaje en Finlandia, último país que se ha integrado en la Alianza.
Mientras tanto, el presidente de la Verkhovna Rada (Parlamento de Ucrania), Ruslan Stefanchuk, está de viaje en Letonia donde se ha reunido, entre otros, con el ex presidente del país, Egils Levits, y le ha podido agradecer personalmente el apoyo letón a nivel militar, financiero y humanitario. De igual modo, Stefanchuk ha expresado que espera “con interés la promoción adicional de Letonia en el camino de Ucrania hacia la membresía plena en la UE y OTAN”.
Además, se ha reunido con el recién nombrado presidente del país, Edgars Rinkēvičs, en la que ha sido su primera reunión internacional, y los portavoces de los Parlamentos letón, lituano, estonio, polaco y alemán.
Cambiando de tercio, pero relacionado con lo plasmado en el informe de ayer, Erdoğan ha expresado su esperanzade que el Acuerdo de Estambul que prevé la Iniciativa de Granos del Mar Negro se prorrogue otros tres meses más. Así, el presidente turco ha expresado incidido en que harán un esfuerzo en ese sentido para evitar que las prórrogas se produzcan cada dos meses en lugar de cada tres, e intentarán aumentar la duración del acuerdo a dos años. En esta línea, y según comienzan a recoger algunas fuentes, Ucrania y Turquía habrían confirmado que la Iniciativa continuará activa incluso aunque Rusia se retire formalmente, siendo la marina turca la encargada de garantizar la seguridad del corredor marítimo para los buques.
Concluimos con una noticia interesante relacionada con la energía. El director ejecutivo de la compañía energética austríaca OMV, Alfred Stern, ha declarado que su compañía no tiene intención de cesar su contrato de suministro a largo plazo con la gasística rusa Gazprom firmado en 2018 y cuya vigencia se extiende hasta 2040. OMV es la empresa encargada de suministrar en torno al 30 por ciento del mercado de gas austríaco, siendo su mayor accionista el propio gobierno. Asimismo, hay que recordar que las sanciones de la UE se refieren únicamente al petróleo ruso, pero no al gas.
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