Tras la captura de Hirske y Zolote por parte rusa, continúan las operaciones destinadas a rodear Lysychansk y cortar la comunicación entre esta ciudad y Artemivsk a través de la carretera T-1302, constantemente golpeada por la artillería y la aviación rusa. Mientras esto ocurre, el gobernador de Lugansk ha reconocido que las tropas ucranianas abandonan Severodonetsk, se sigue especulando con el número de militares ucranianos atrapados Hirske y Zolote y hemos podido ver los HIMARS donados por Estados Unidos disparar por primera vez. Todo en el día en que se cumplen cuatro meses desde el inicio de la invasión.
Después de los numerosos logros rusos de las últimas 48 horas, hoy la jornada se ha presentado más tranquila en cuanto a movimientos, aunque no ha estado exenta de luchas ni de novedades interesantes para el devenir del conflicto. Siguiendo con el orden geográfico habitual en nuestros informes, comenzamos por Járkov, región en la que se han producido diversos bombardeos que han supuesto la muerte de dos personas en la capital y al menos una decena de heridos. También en Staryi Saktiv o en Dementivka se han reportado ataques artilleros sobre las posiciones ucranianas.
En el eje Izium-Limán-Sloviansk la situación permanece estática desde hace varias jornadas, sin que eso haya supuesto una disminución en el ritmo de intercambios artilleros, especialmente del lado ruso. Hay que decir que en función del analista al que se recurra, el Ejército ruso estaría empleando en Ucrania entre 50.000 y 60.000 disparos diarios, un consumo altísimo que podría estar haciendo mella en sus reservas de municiones, de ahí que estuviesen recurriendo a los stocks bielorrusos.
Ahora bien, no debemos perder de vista que es más rápido y económico mover municiones desde Bielorrusia al Donbás o Járkov que no desde Siberia, algo que podría estar detrás de algunas de estas informaciones provocando malentendidos o juicios erróneos sobre la disponibilidad rusa de municiones. Tampoco los informes sobre cómo Rusia estaría recurriendo al mercado internacional para algunos componentes, recambios y también municiones, además de para negar el acceso ucraniano a todo ello.
En la zona de Severodonetsk-Lysychansk hoy el gobernador ucraniano de la región de Lugansk ha reconocido básicamente que la situación en Severodonetsk es insostenible, que no merece la pena defender las posiciones que todavía mantienen allí y que les toca replegarse hacia Lysychansk. Las informaciones sobre esta ciudad y sus alrededores son bastante confusas y van desde que las defensas son sólidas y la retirada de parte de las unidades hacia Sloviansk-Artemivks un éxito, hasta que está siendo un verdadero caos. Mientras esto ocurre, tanto la artillería rusa como su aviación están tratando de golpear en la medida de lo posible la vía principal, la carretera T-1302, en la que hoy han volado al menos un puente a la altura de la refinería de Verkhn’okam’yanka.
Lo más sorprendente, no obstante, es el hecho en sí de que se esté produciendo algún tipo de retirada en vista de la concentración de bocas de fuego que han llevado a cabo rusos y aliados en las últimas semanas. Esto apunta a que si bien son capaces de batir zonas, tienen problemas para hacer maniobras artilleras y también, aunque esto no es ninguna novedad, con la precisión. No es de recibo que, ni con el concurso de la aviación tanto de ala fija como de ala rotatoria, los ucranianos estén logrando evacuar personal y medios. Quizá convenga revisar lo pasado en 2014 en Zelenopilla y quizá, si lo hacemos, lleguemos a la conclusión de que las capacidades artilleras rusas se hincharon sobremanera en algunos sentidos…
Hablando de evacuaciones, siguen las discusiones en torno al volumen de tropas y equipos ucranianos atrapados en Hirske y Zolote. Las fuentes rusas siguen hablando de más de 2.000 uniformados de cuatro batallones, incluyendo efectivos de la 24ª Brigada Mecanizada ucraniana. Por el momento, las pruebas gráficas apuntan a lo que dijimos ayer en esta misma página: a lo sumo unos centenares de ucranianos en su mayoría de las Fuerzas de Defensa del Territorio y muy poco material pesado (de hecho, todavía no se ha visto este último). Habrá que esperar no obstante a ver cómo se desarrollar la retirada desde Severodonetsk (recordemos que no hay puentes en pie) y las pruebas que vayan apareciendo en los próximos días, para hacer una valoración más exacta de las pérdidas ucranianas.
Pérdidas que sin duda siguen aumentando por ambos bandos según se sigue combatiendo. Al sudoeste de Lysychansk es en donde más enfrentamientos se están reportando, con el epicentro en torno a la refinería de Verkhn’okam’yanka, aunque en general a todo lo largo de la T-1302 en la zona. El punto de contacto hoy en esta zona está en Bila Hora, en Vovchoyarivka y una vez más en Bilohorivka, localidades todas ellas en disputa hasta el momento.
Al sur del saliente de Popasna -que tras los avances rusos de los últimos días ya es más bien un frente lineal prácticamente en paralelo con la T-1302-, en concreto en Svitlodarsk, rusos y ucranianos estarían luchando en Novoluhanske, en donde estos últimos podrían quedar embolsados si los rusos logran tomar la central térmica de Vuhkehirs’ka. O bien si contactan Semyhirja con Rotti por la pista que une ambas localidades y que defiende la posición ucraniana que podéis ver en la imagen que mostramos a continuación (en la siguiente también la posición sobre el mapa de dicha línea de trincheras).
Al sur del país no dejan de llegar indicios sobre avances ucranianos, no así pruebas tangibles. Se habla de retiradas rusas hacia Ol’hyne, de tropas ucranianas en la entrada de Jersón, e incluso de la toma de un par de villas cercanas a Vuhledar que permitirían, al menos teóricamente, hacer fuego con los HIMARS sobre Mariúpol, una ciudad cada vez más importante para la logística rusa. No obstante, o bien algunas imágenes no se pueden geolocalizar o bien las noticias se basan únicamente en reportes oficiales y, por lo tanto, parciales.
Por cierto que, respecto a los HIMARS, hoy ha llegado el primer vídeo de lo que podría ser el primer uso de estos del lado ucraniano. Se desconoce el lugar desde el que se han empleado, como también el objetivo alcanzar.
Para finalizar con la parte militar, los cambios de posiciones confirmados en las últimas horas serían los siguientes:
- Óblast de Járkov: Sin movimientos.
- Óblast de Lugansk: Sin movimientos.
- Óblast de Donetsk: Sin movimientos.
- Óblast de Zaporiyia: Sin movimientos.
- Óblast de Jersón: Sin movimientos.
- Óblast de Nikolayev: Sin movimientos.
Contexto internacional, diplomacia y sanciones
Se cumplen cuatro meses desde el inicio de la invasión de Rusia a Ucrania y seguimos sin ningún atisbo de acuerdo de paz, sino más bien todo lo contrario. Tras el día de ayer en el que Ucrania y Moldavia recibieron 27 “síes” y, con ello, el estatus de candidatos oficiales a la adhesión a la UE, los jefes de Estado y de Gobierno de la UE han discutido sobre economía.
Al término del Consejo Europeo, los líderes han advertido de que “la energía barata se acabó”, pero seguirán preparándose de cara a recortes adicionales en el suministro de gas ruso. La preocupación generalizada por el aumento de los precios de la energía, alimentos y materias primas no puede ya esconderse por parte de las Instituciones y dirigentes. Esto ha motivado la segunda advertencia, que no ha sido otra que la de que nos espera un “invierno duro”.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha hecho hincapié en que la inflación es una gran preocupación para todos y así lo han puesto de manifiesto en la cumbre del Euro que ha tenido lugar hoy. Entre los principales acuerdos, encomendar a la Comisión Europea que encuentre más vías para asegurar el “suministro a precios asequibles” habida cuenta de que Rusia está utilizando el gas como arma. El segundo de los temas clave que han discutido ha sido el de la arquitectura financiera europea, respecto de la cual los líderes parecen seguir comprometidos con la culminación de la unión bancaria. Por supuesto, también era obligado hablar sobre Croacia, ya que en enero de 2023 adoptará el euro.
En paralelo a la finalización de la Cumbre del Consejo Europeo, ha tenido lugar la Conferencia Ministerial de Berlín “Unidos por la Seguridad Alimentaria Global” a la que también han asistido mientras de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) y de la Oficina de la Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (UNOCHA). En este encuentro los participantes han tratado de promover iniciativas globales para abordar la inseguridad alimentaria, pero también para hacer frente a los desafíos que plantean el cambio climático, el covid-19, otros conflictos y las cadenas de suministro.
El secretario general de las Naciones Unidas ha advertido que, debido a la guerra en Ucrania, junto con las distorsiones planteadas por el cambio climático, la pandemia de covid-19 y la desigualdad pueden dar lugar a una “crisis mundial de hambre sin precedentes” debido al aumento de la escasez de alimentos que afecta a cientos de millones de personas. Insiste en que “existe un riesgo real de que se declaren múltiples hambrunas en 2022” y “2023 podría ser aún peor”.
También se han reunido los representantes de Exteriores del G7 en Alemania como parte de los preparativos de la próxima cumbre. La anfitriona de la reunión, Annalena Baerbock, en relación con los temas que estamos abordando ha afirmado:
“No aceptamos que la guerra de agresión rusa esté haciendo que el mundo sufra hambre. Como las naciones industrializadas más poderosas, tenemos una responsabilidad especial. (…) Rusia está librando una cínica guerra de granos, usándolos como una herramienta para disparar los precios de los alimentos y desestabilizar países enteros”.
Debido al bloqueo de los puertos marítimos ucranianos el puerto de Constanza en Rumanía se sigue consolidando como la principal ruta alternativa para dar salida a las exportaciones ucranianas. Por el momento, ha procesado casi un millón de toneladas de grano de Ucrania, pero el director de Comvex – el principal operador portuario – señala que si quieren seguir ayudando a los agricultores necesitan ayuda para aumentar su capacidad pese a que pueden procesar hasta 72.000 toneladas de cereales al día.
El presidente estadounidense Joe Biden ha enfatizado que está haciendo todo lo posible para mitigar “el aumento de los precios de Putin” y reducir el coste de la gasolina y los alimentos. Además, Estados Unidos está contribuyendo para exportar el grano ucraniano y lograr una bajada en los precios. Una de las medidas propuestas ha sido la de pedir al Congreso que suspenda el impuesto federal a la gasolina durante tres meses y que los Estados proporcionen un alivio fiscal similar. Conjuntamente, está instando a las compañías petroleas para que aumenten su capacidad de refinación.
Finalmente, se materializó el anuncio esperado por parte de la Casa Blanca. El presidente Biden ha autorizado al Departamento de Defensa a retraer hasta 450 millones de dólares para satisfacer las necesidades críticas de Ucrania. El nuevo paquete de ayuda militar incluiría 4 HIMARS adicionales, 36.000 disparos de 155 mm, 18 vehículos tácticos para remolcar artillería de 155mm, 1.200 lanzagranadas, 2.000 ametralladoras, 18 patrulleras costeras y fluviales, repuestos y otros equipos.
Por otro lado, la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) ha recalcado hoy que cada vez están más preocupados por el bienestar del personal ucraniano que está trabajando en la central nuclear de Zaporizhia bajo las órdenes de las tropas rusas. Consideran que supone un riesgo para la seguridad, por lo que la Agencia desea enviar una misión.
A modo de cierre, durante el fin de semana saltaremos además a otra cumbre importante, la del G7 en Schloss Elmau, Alemania. Durante los días 26, 27 y 28 los líderes de Estados Unidos, Alemania, Canadá, Francia, Italia, Japón y Reino Unido discutirán sobre cómo ayudar a Ucrania tratando de dar forma a un nuevo Plan Marshall y de ofrecer una respuesta unitaria a la crisis de seguridad energética y alimentaria.
Asimismo, a este encuentro le seguirá la esperada Cumbre de la OTAN en Madrid los días 29 y 30 en la que está previsto que los aliados respalden un nuevo Concepto Estratégico para guiar la transformación de la organización en la próxima década, incluido el refuerzo de la política de disuasión y las capacidades de defensa o el aumento de la resiliencia frente a las amenazas cibernéticas y climáticas.
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